Un pequeño review

Lo confieso, entré a ver Matando Cabos totalmente a ciegas y únicamente porque era la única función que había a la hora que llegué al cine. La incertidumbre comenzó al ver los créditos iniciales, reconocí a Tony Dalton y a Kristoff del patético programa de TV calcado del Jackass de MTV llamado No te equivoques; ví con horror que no sólo eran actores del filme, sino también los escritores del guión. Me preparé para lo peor. Las sorpresas vinieron después, cuando descubrí una película bastante agradable, irónica y entretenida, con vestigios del humor negro característico del film noir.

La película tiene sus fallas: los flashbacks son poco afortunados, y el personaje de Rubén (a)Mascarita se siente acartonado y como una mala caricatura del santo (estoy consciente de que esa es la finalidad del personaje, sin embargo, todo se queda en la intención). Las actuaciones, sin embargo, son rescatables, y tanto Tony Dalton como Kristoff revelan una veta oculta de actuación dentro de sus humanidades, Ana Caludia Talancón está hermosa, como siempre, y Pedro Armendáriz Jr hace relucir sus probadas capacidades para encarnar personajes poderosos y prepotentes.

Cabe mencionarlo, Matando Cabos no es una película innovadora en ningún aspecto, y retoma el hilo que filmes como Nicotina han marcado para esta reciente generación de cine mexicano, a pesar de todo es un bienvenido respiro a filmes como Zapata o Ladies Night.